Escribo esto con mucho respeto a mis amigos bikers, y sin la intención de ofender a nadie.

Realmente lo intenté. Saqué brevete, SOAT, aprendí a manejar. Practiqué bastante, monté durante las noches y fines de semana. No diré que no era divertido a ratos. Probablemente si la intención hubiera sido usarla para pasear otra sería mi percepción, pero la idea era viajar de manera rápida y eficiente de mi casa a la oficina, de la oficina a la UPC, de la UPC a mi casa, en hora punta.
No resultó. El gasto en gasolina es mínimo, con un rendimiento de mas de 200kms por galón, eso es innegable; y si te gusta meterte entre los carros definitivamente ahorras algo de tiempo.
Pero, en lo personal, no le encontré la gracia. Me imagino que tienes que tener en la sangre el gusto por las motos, al punto de que no te importe que los carros no te respeten, no tener un armazón de fierro a tu alrededor, no poder escuchar música y no poder llevar nada a donde vayas.

Lo que menos me gustó de esta experiencia es el sentimiento de que eres el "arrimado" de la pista. Uno que no tiene derecho a nada. Haces luces y nadie las respeta. Lo se, con los carros pasa lo mismo, pero es tan simple como que metes un poco el carro y se acabo el problema. En cambio metes un poco la moto y puedes ir llamando a la clínica.

No me gusta ser el chiquito del tono.

Es muy divertido para pasear en moto si la intención es pasear en moto. Probablemente en el futuro me compre otra que tenga para pasear, pero como por el momento no es lo que necesito. Vendo mi moto.


Over and out.



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Publicado en Facebook dias despues del post:

Manejando por Javier Prado tranquilo, sin un plástico en la cabeza y otro en los ojos, sin frío, sin stress, mientras le meto el carro al del costado para subir en San Luis (única forma de cambiar de carril en este país), sabiendo que si me topa se abolla el carro y listo. Llevando mochila y trago en la maletera. Todo mientras escucho música en mi equipo epic, juego en el iPad y posteo en Facebook.